No siempre es fácil tomar decisiones en determinados momentos de nuestra vidas, para algunas personas el proceso de toma de decisiones puede ser un verdadero suplicio por nimias que estas sean. Hoy compartiré con vosotros un par de trucos para facilitar este proceso, ahí va el primero:
-creo que casi todos hemos comprobado la facilidad con la cual damos consejos a los demás ante una determinada encrucijada y he aquí el primer truco: pensar que le dirías a algún allegado en la misma situación.
Otra forma de facilitar el proceso sería la llamada regla del 10-10-10, consistente en pensar en las posibles repercusiones de una determinada decisión dentro de 10 días, diez meses y diez años.